El exiliado presidente de Bolivia, Evo Morales,
será el jefe de campaña del Movimiento al Socialismo (MAS) en los próximos
comicios si el régimen de facto le permite retornar a su país, afirmó ayer su
correligionario y líder de la Cámara de Diputados, Sergio Choque.
Si el gobierno permite su retorno, Morales va a
ser nuestro jefe de campaña, porque él sigue siendo el presidente del MAS y por
eso es que con él se coordinan las decisiones del partido, declaró Choque.
El diputado representante de El Alto, ciudad
vecina de La Paz, asumió la presidencia de la cámara baja, tras la renuncia del
anterior titular, el también masista Víctor Borda, quien durante las protestas
tras el derrocamiento de Morales, el 10 de noviembre, sufrió el incendio de su
casa y el secuestro de un hermano.
Choque confirmó que, al margen de
consideraciones legales y en un gesto en favor de la pacificación del país,
Morales ha comunicado al MAS que ni él ni su vicepresidente Álvaro García
Linera, volverán a ser candidatos.
El líder indígena enfrenta un proceso judicial
iniciado por el régimen de facto de Jeanine Áñez, que lo acusa de sedición y
terrorismo por supuestamente liderar las protestas que siguieron al reciente
golpe de Estado y en las que murieron más de 20 manifestantes que lo
rechazaron.
Una segunda demanda, por los mismos delitos, fue
presentada por el diputado indígena Rafael Quispe, quien se incorporó al
gobierno de Áñez.