Por Xan Pereira Castro - junio 13, 2019
Reino Unido ha cedido ante Estados Unidos y ha
firmado la orden de extradición de Julian Assange después de la petición formal
de Washington. Assange se enfrenta a varios delitos de espionaje y de
publicación de documentos altamente clasificados, en relación con la filtración
masiva del 2010.
«En primer lugar, estoy muy satisfecho de que la
policía pudiera detenerle y ahora está justamente entre rejas porque quebrantó
la ley del Reino Unido«, ha manifestado el ministro del Interior británico,
Sajid Javid, el encargado de firmar la extradición.
El 11 de abril Assange fue detenido por la
Policía británica tras ser sacado a rastras de la embajada ecuatoriana en
Londres, después de que Quito rescindiera el asilo que le había concedido en
2012. La petición formal de extradición fue presentada la semana pasada, poco
antes de que se cumpliera el plazo legal para ello. El tratado de extradición
entre Londres y Washington establece que cualquier petición de extradición debe
ser formalizada en un plazo de 60 días.
La petición de extradición de Estados Unidos se
fundamenta en la acusación que presentaron en su contra en mayo fiscales
federales en la corte del distrito este de Virginia, con sede en Alexandria.
La acusación argumenta que Assange ayudó a la
exsoldado Chelsea Manning a descifrar las claves de acceso de los equipos
informáticos del Gobierno de Estados Unidos para entrar dentro esos sistemas y
extraer información secreta sin dejar huella. A finales de mayo, el
Departamento de Justicia de Estados Unidos amplió su investigación y acusó a
Assange de haber violado la Ley de Espionaje al filtrar información secreta, en
lo que supone una escalada en la gravedad de los delitos que se le imputan.
Fuente: Spanish Revolution