Masacre en cámara lenta. Más de 200 líderes
sociales asesinados desde que se firmó la paz en 2016. Los activistas están
siendo blanco de guerra en aras del control territorial, minería ilegal y
cultivos ilícitos.
Por Juan Manuel Arango C.
Asesinan a un ecuatoriano, o miran indiferente a
un venezolano, y es motivo más que suficiente para que la “llama de la
solidaridad”, se encienda hasta los topes máximos, desde los cafetines hasta
los grandes medios de la desinformación masiva y que no decir los “Pilatos”
dentro del régimen que vertiendo lágrimas de cocodrilos, salen a suplicar por
el no más indiferencia, por la solidaridad etc, etc., distinta años luz, a la
de cuando asesinan, masacran a nuestro propio pueblo destacado por defender la
vida misma, les arrebatan sus vidas y lo que es peor, posándolos como un numero
mas pero no en los defensores de los derechos humanos, sino como ya es
costumbre el ministro de la “defensa” a ser delincuentes organizados o comunes,
o “líos de faldas”Noticias….
Como ya no es halagador para los sega vidas
humanas de a unidad, entonces reviven las masacres y es lo que ocurrió en
Argelia Cauca, asesinando a siete personas; donde los grandes medios de la
desinformación la minimizan con la sensacional noticia “dos, eran disidentes de
las farc” y los restantes “con antecedentes”
sin profundizar sobre los hechos en la realidad.
“La muerte de 311 representantes de las
comunidades entre el 1 de enero de 2016 y el 30 de junio de 2018 (homicidios
registrados por la Defensoría del Pueblo), llevó a que varios colectivos
convocaran a esta. Un alto funcionario
de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), recientemente
señaló: es “una preocupación creciente el aumento de asesinatos y amenazas
contra defensores de los Derechos Humanos y líderes comunitarios en la costa
del Pacífico”, que en la mayoría de los casos, precisó, son indígenas o afro
descendientes” y eso que esa cifra en muy inferior a la realidad solo enmarcada
después de la firma de “paz” con las Farc-Ep.
“masacre en cámara lenta”, refiriéndose a los
más de 200 líderes sociales asesinados desde que se firmó la paz en 2016. Los
activistas están siendo blanco de guerra en aras del control territorial,
minería ilegal y cultivos ilícitos, y sus crímenes quedan impunes.”
“En su cuenta de Twitter, el excandidato
presidencial, Gustavo Petro, señaló a un comandante de la policía en Cáceres,
de haber amenazado en plena campaña a Ana María Cortés” y hoy es un número más…
entre los asesinados y el faltón ministro de la “defensa” sentencia: “y quien
al parecer tendría algún vínculo con las redes de apoyo del Clan del Golfo” para
la audiencia internacional de CLARIN de Colombia, el aludido “clan del golfo”
es algo así como una organización a la comercialización y producción de drogas
ilícitas y se vale de lo que sea para mantenerse, y recientemente en otros
asesinatos dijo que eran “líos de faldas”
Culpables…
Los criminales que se hacen escuchar mediante el
asesinato de quien diverge con ellos; la indiferencia de los extraterrestres
que idolatran al verdugo y amo; la complicidad, por parte de la mayoría de
quienes se hacen llamar “Defensores de Derechos Humanos”, que a la postre
resultan ser la comisión de aplausos del régimen y del criminal; porque nunca
se les oye condenando enérgica y masivamente al opresor, no convocan, movilizan
al pueblo en contra de la barbarie.
Algunas personas de éstas, se arropan con
rimbombantes siglas, y vísperas a cualquier evento electoral, aparecen como por
arte de magia, discurriendo en tiernos, emotivos, conmovedores y locuaces
discursos veintejulieros “condenatorios al opresor” que ni un comunicado ante
la opinión pública emiten por miedo; y pasado el evento, posan, duermen y comen
con verdugos; pero ellos si son los “revolucionarios” que también me
estigmatizan por denunciarles por igual como denuncio al criminal material e
intelectual de mi querido “Juan Pueblo”, porque según esas personas, yo no soy
revolucionario y ellos sí. ¡Vergüenza les debiera dar!
Las víctimas
Ahora, las víctimas de éste genocidio, son los
“culpables” Defensores de los Derechos Humanos y líderes Sociales; mientras que
antes de la tan cacareada “firma de la paz”, perdían la vida en su mayoría eran
combatientes de distintos lados, pero en igualdad de condiciones, mas no
alevosamente imponiendo el poder de las armas contra personas indefensas que
solo tenemos nuestra voz o pluma para protestar, disentir o denunciar; pero que
desgraciadamente la mayoría de mi pueblo votó en contra de la paz, porque votar
por una opción distinta, “nos expropian, Colombia se vuelve homosexual, se
acaba la integridad de la familia” entre otras
Llamado…
A la audiencia internacional, Defensores de
Derechos Humanos, a fijar su mirada en mi querida Colombia, en mi querido “Juan
Pueblo” antes de que sea demasiado tarde; pues al ritmo que vamos en Colombia,
yo mismo seré una cifra más en los asesinados por decir la verdad en el momento
que toque y sin tapujo alguno; ayudarnos a desenmascarar al falso “nobel de
paz” conjuntamente con el régimen criminal, que poco o nada hace por defender
el derecho a la vida comenzando por desmontar el paramilitarismo y la miseria
social; en procura de una vida digna y paz con justicia Social.
Consejero de Paz, Reconciliación y Convivencia.
(CPRC)
Director de CLARIN de Colombia
www.clarindecolombia.info
Pre Candidato a la Alcaldía Municipal de Soacha
clarinesdecolombia@gmail.com
Fuente: Barómetro Latinoamericano