Por Pablo Ciccarelli. 18/5/2018.- En las últimas horas, difundí una foto de una
camioneta, propiedad del preso Daniel “tavi” Celis, reconocido narco del
litoral, al que vinculan con algunos funcionarios municipales de Paraná donde
se encuentra el presidente Macri (en ese momento candidato), el ahora
intendente de la ciudad (imputado por la Justicia federal), el senador Alfredo
De Ángeli, y la presidente del Concejo Deliberante de la capital entrerriana,
Josefina Etienot.
En la foto se puede ver a los entonces
candidatos en la caja de una camioneta que pertenecía a la banda de
narcotraficantes que se encuentran detenidos por orden del juez Leandro Ríos.
Es más, lo escoltan varias motos de personajes del ambiente delictivo que ahora
también están detenidos.
El intendente de Paraná y otros funcionarios
fueron imputados y llamados a declarar el martes próximo.
A pesar que varios políticos están vinculados
fotográficamente con los “tranzas”, solo llamaron a declarar al intendente
Varisco, a la subsecretaria de seguridad, Griselda Bordeira y al concejal Pablo
Hernández, todos de Cambiemos.
Hoy se levantó el secreto de sumario y dentro
del expediente se pudo saber que otros de los implicados en el allanamiento
positivo a la casa del narco es el concejal del PRO Emanuel Gainza pero no fue
llamada a indagatoria ni fue allanado su domicilio como hicieron con los demás
funcionarios sospechados de ser parte de una banda de narcotraficantes, algo
cuasi imposible de probar.
Pero que el narco participó de la campaña, ya no
queda dudas y esta foto es la prueba que confirma el nexo.
Lo cierto es que si Varisco fue engañado y no
sabía que el puntero político vendía drogas o sí, también lo debían saber todos
aquellos que otrora son funcionarios gracias al supuesto aporte de campaña de
origen delictivo. Todos lo que están en la camioneta propiedad del delincuente:
hasta el mismísimo presidente de la Nación.