N.R. de Utophia.- Los genocidas no sólo
utilizaron los "Falcon verdes" para secuestrar, también utilizaron la
planta de General Pacheco para torturar y secuestrar a sus obreros.
En el juicio por delitos de privación ilegal de libertad,
tortura y homicidio, están imputados el general retirado Santiago Omar Riveros
y tres ex directivos de Ford.
Sólo 12 de los 24 obreros secuestrados, llegan con
vida al juicio. Todos ellos fueron secuestrados y torturados en en un centro
clandestino de detención denominado "el quincho" que funcionaba
dentro del predio de la fábrica. Nuestro conocido abogado Ciro Annichiarico,
estará a cargo de la querella de la Secretaría de Derechos Humanos de la
Nación.
LOS GERENTES DE FORD A JUICIO ORAL POR DELITOS DE LESA
HUMANIDAD EN ARGENTINA
Arranca el 28 de este mes en San Martín. Carlos
Propato, sobreviviente y querellante, habla del juicio, del intento de
contrarreforma laboral y de la convocatoria de los trabajadores de Pepsico para
este jueves.
Andrea López
El norte del Gran Buenos Aires, la zona
industrial más importante del país no lo era sólo por el peso en la economía de
las grandes multinacionales y empresas que empleaban a miles de trabajadores.
Dentro de ellas esos miles de obreros se organizaban cada vez en mayor medida
en los lugares de trabajo, pero también en las Coordinadoras Interfabriles. Los
trabajadores de Ford eran parte fundamental de ese proceso.
El famoso "El Quincho" ubicado dentro
del predio de Ford, era un lugar en el que los trabajadores compartían momentos
de distensión.
Allí se reunían y organizaban y a principios de
los 70 pusieron en pie el cuerpo de delegados de la fábrica. Pero a partir del
golpe genocida del 24 de marzo de 1976, fue en ese mismo lugar donde se los
secuestró y torturó.
En la causa están imputados Santiago Omar
Riveros, de 94 años, entonces director de Institutos Militares y de quien
dependía la guarnición Campo de Mayo, además de los ex directivos de la
multinacional automotriz Pedro Müller (85), gerente de Manufactura, y Héctor
Francisco Sibilla (90), jefe de Seguridad de la planta.
Otros de los procesados en la causa pero que
murieron impunes gracias al dilate de la justicia para comenzar el juicio eran
el ex gerente de Relaciones Institucionales de Ford, Guillermo Gallarraga y
Nicolás Enrique Julián Courard, en aquel entonces presidente de Ford.
En pocos días comienza el juicio contra Ford por
tu secuestro y tortura junto a tus compañeros. ¿Cómo se preparan?
El juicio es contra estos empresarios, estos
gerentes y tenemos mucha expectativa, es muy importante para nosotros y para
todo el movimiento obrero que esto siga adelante y podamos juzgar algunos
civiles empresarios del terrorismo de estado, que fueron los que hicieron el
terrorismo de estado le estamos poniendo todo lo q se puede seria muy
importante q esto avance y que nos acompañen y que todo el que pueda acercarse
al juicio nos preste apoyo.
Las empresas junto a la burocracia sindical
fueron parte del golpe genocida. ¿Cómo fue el rol dentro de la Ford y en la
zona norte?
Las empresas y la burocracia sindical fueron
parte y estuvieron totalmente con el golpe genocida del 76. Para ellos era muy
conveniente el golpe de estado. Dentro de la Ford nosotros luchamos a brazo
partido por nuestros derechos y hasta el final. Mi lucha terminó el 13/4/76
cuando fuí secuestrado, no fuí ni el primero ni el único. Nos hicieron
desaparecer de la política y eso fue importante porque la gente empezó a tener
miedo dentro de la fábrica, se perdieron la mitad de las cosas que habíamos
conseguido con la lucha sindical.
¿Cómo era la lucha y organización de ustedes y
en la zona norte en ese momento?
Dentro de la fábrica el movimiento sindical y
político luchaba a brazo partido contra la burocracia, que arrinconaba a los
obreros y nos ponían en una situación altamente difícil, no solamente en la
Ford que era uno de los pilares más grandes del cinturón industrial de zona
norte, sino que en todas las empresas. Alrededor de Ford, desde Tigre a
Escobar, todo ese cinturón industrial de zona norte se puso en lucha,
arrancando desde Astarsa a todas las empresas que estaban en lucha en aquella
época. Ojalá hoy se hiciera así, porque lo que necesitamos es la unidad del
conjunto de los trabajadores.
El Gobierno intenta imponer la reforma laboral.
¿Qué relación ves entre la lucha de ustedes y la pelea que tenemos por delante
los trabajadores?
Nosotros lo vemos totalmente como un retroceso a
la época de las cavernas, vamos a perder todo lo que ganamos durante toda una
vida de lucha.
Yo tengo más de 50 años de trabajo dentro del
movimiento obrero y he visto muchísimas cosas. He visto caídas pero hemos
conseguido muchísimas conquistas. Se agarran de que son gobierno y piensan que
tienen el derecho de hacer lo que quieran.
Queremos saber qué piensa hacer la CGT, dicen
que van a aceptar 90 puntos de los 100 que plantea el borrador de reforma. Se
vió toda la vida, la burocracia sindical hizo siempre mucho daño al movimiento
obrero.
¿Qué opinás de la convocatoria de los trabajadores
de PepsiCo para pelear contra la reforma laboral?
Ojalá todos los trabajadores tuvieran la
mentalidad y la fuerza de lucha que tienen estas mujeres y hombres que han
perdido su fuente laboral y están pasando un momento muy crítico en su carpa
ahí frente al Congreso.
Yo creo que todos los obreros se tienen que
alinear a esta lucha y el jueves a las 18 h. estar todos en el Congreso
apoyando para enfrentar la reforma laboral, porque de lo contrario vamos a
perder todo lo que ganamos.
Esto no es solamente acá, es en todo América
Latina, y es lo que está bajando de los EE.UU para acá como fué en el 76. En
Europa, en Francia ya hicieron la reforma, en Brasil también y todo el
movimiento obrero latinoamericano y mundial está en peligro. Es un avance total
de la oligarquía contra los trabajadores, todo esto es en beneficio de las
grandes empresas y los empresarios.
Ahora pretenden que nos paguemos nosotros la
indemnización, le quieren sacar todo al obrero, son todos beneficios para las
grandes empresas y al trabajador no le queda nada. Dicen que quieren blanquear
a los obreros que están en negro pero eso es mentira.
Yo soy un trabajador y siempre voy a seguir
pensando que de todos los derechos que ganamos no tenemos que perder nada, ni
un paso para atrás!
El juicio comienza el 28/11 en un momento muy
particular por la desaparición y asesinato de Santiago Maldonado y con un
gobierno cuyos funcionarios niegan el genocidio.
El juicio comienza el 28/11 con la presentación,
la primer audiencia la vamos a tener el 19/12 y continuará el próximo año.
Lo importante es que empiece, sabemos que va a
ser un juicio muy largo y que estamos peleando contra una empresa
multinacional, una de las más fuertes del mundo.
Nosotros de los 24 que éramos quedamos solamente
12 y los familiares, pero la lucha seguirá. Ya estamos grandes pero si se logra
el triunfo de hacer pagar a los empresarios, será una bandera de lucha para las
nuevas generaciones que van a venir, para esos pibes de 18, 20 años que están
recién entrando en el gran engranaje obrero.
Estas luchas son importantísimas para ellos. Que el
juicio de Ford se haga y nosotros podamos condenar a estos genocidas que nos
hicieron pasar momentos muy pero muy terribles por el sólo hecho de reclamar
nuestros derechos, porque sólo luchábamos por nuestros derechos es un triunfo
para toda la clase obrera.
Fuente: La Izquierda Diario
