"Recordemos que es muy agradable sentir olor a fresco y limpio
de la persona que nos sirve el desayuno." La cita pertenece a Cómo
conseguir una mucama… y no perderla en 7 días, el libro de Mercedes de
las Casas, legisladora porteña del PRO. El volumen se vende como una
guía "fresca", "práctica" y aún "amena" para lidiar con el personal
doméstico. Quizá por eso en sus páginas se especula: "Recordemos que no
siempre la mucama posee gran capacidad de recepción y memorización."
Bajo un velo de supuesta complicidad entre empleadora y empleada, el
escrito presenta dosis parejas de lo que la academia llamaría "racismo
tecnocrático" y "darwinismo social".
"Son lecturas que se pueden hacer. Por ahí se puede decir: 'Esta es una gorila que hace un libro sobre mucamas.' Pero eso es sacarlo de contexto", dice a Tiempo la diputada en su radiante despacho. "En realidad, el libro lo escribió mi madre –aclara–. Y eso fue ya hace mucho tiempo." La portada, sin embargo, destaca que la obra fue redactada a cuatro manos entre Mercedes y su madre, la especialista en management empresarial Gloria de las Casas. La obra publicada por Planeta llegó a las librerías en 2007, el mismo año en que la joven ingresó a la función pública.
Desde enero pasado, ocupa una banca en la Legislatura, donde integra la Comisión de Antidiscriminación. Milita en el PRO desde 2003, pero su vínculo con la política viene de antes: "Siempre tuve una tendencia a ayudar." Trabajó en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, bajo el ala del actual vicejefe de Gobierno Diego Santili; luego migró para asesorar a Cristian Ritondo, y finalmente tomó vuelo propio como directora general de Patrimonio. "Me aboqué mucho al trabajo con niños –puntualiza–, me interesa la solidaridad", y confiesa que la inquieta la higiene de la urbe y el trabajo de los recicladores: "Me he subido al camión con ellos y pasé horas acompañándolos. Defiendo la mano de obra." Entre los proyectos que ha elevado, se destacan diversas declaraciones: desde adherir al último Acuerdo de Cambio Climático de París hasta nombrar huéspedes de honor a la cantante melódica italiana Laura Pausini y a su colega estadounidense Mariah Carey. Otra de sus iniciativas –por la cual le llovieron críticas– fue impulsar como personalidad destacada a Adriana Szusterman, la maestra jardinera que triunfó en la canción infantil interpretando el tema del Sapo Pepe. Según De las Casas, con sus declaraciones busca reconocer a personalidades solidarias que "hagan algo positivo. Los egos personales no me gustan."
Sobra la génesis del libro, explica que hace diez años
comandaba Mastermaid, un centro de capacitación para personal doméstico.
"Era un momento difícil, veníamos de la crisis de 2001. Crecí con la
empresa, di 1100 puestos de trabajo por la capacitación. Garantizábamos
que la persona tenía que quedar en blanco. Como me enseñó Perón, creo
que hay que dignificar los oficios", subraya. De las Casas confiesa que
escribió un capítulo del libro, pero no recuerda cuál. "Me enfoqué en
temas del uniforme, darles pautas a ellas para que valoren el trabajo
que están haciendo." El libro explica que "las profesiones más dignas
llevan su uniforme con orgullo: azafatas, enfermeras, policías".
Mercedes cita como ejemplo a la empleada que se encarga del cuidado de
sus cuatro hijos: "Lina, que es la persona más importante de la casa,
sola se pone el uniforme porque se tira a jugar con los chicos al piso.
Ella es mi compañera."
–¿Hace mucho que Lina trabaja para su familia?
–Desde siempre. La realidad es que ella es la persona que hace que nosotros podamos funcionar en sociedad. Es parte de la familia. Su hijo me preocupa tanto como los míos. El libro pretendía que ellas supieran el valor que tienen como profesionales.
Consultada sobre la ley que reglamentó el trabajo para el personal doméstico, sancionada en 2013, cree que ha mejorado la situación del sector. "Ni Perón sacó una ley para ellas. Me parece que hemos evolucionado. Ya no hay cuartos de servicio, que eran vergonzosos. Si Lina se tiene que quedar a dormir, tiene el mejor cuarto. Que duerma en mi cama, no me importa. Cuida a mis hijos, que son lo más importante", cierra la diputada antes de posar para la foto, custodiada por un óleo de Ítalo de Luca titulado simplemente "Amigas". «
Fuente: TiempoAr
"Son lecturas que se pueden hacer. Por ahí se puede decir: 'Esta es una gorila que hace un libro sobre mucamas.' Pero eso es sacarlo de contexto", dice a Tiempo la diputada en su radiante despacho. "En realidad, el libro lo escribió mi madre –aclara–. Y eso fue ya hace mucho tiempo." La portada, sin embargo, destaca que la obra fue redactada a cuatro manos entre Mercedes y su madre, la especialista en management empresarial Gloria de las Casas. La obra publicada por Planeta llegó a las librerías en 2007, el mismo año en que la joven ingresó a la función pública.
Desde enero pasado, ocupa una banca en la Legislatura, donde integra la Comisión de Antidiscriminación. Milita en el PRO desde 2003, pero su vínculo con la política viene de antes: "Siempre tuve una tendencia a ayudar." Trabajó en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, bajo el ala del actual vicejefe de Gobierno Diego Santili; luego migró para asesorar a Cristian Ritondo, y finalmente tomó vuelo propio como directora general de Patrimonio. "Me aboqué mucho al trabajo con niños –puntualiza–, me interesa la solidaridad", y confiesa que la inquieta la higiene de la urbe y el trabajo de los recicladores: "Me he subido al camión con ellos y pasé horas acompañándolos. Defiendo la mano de obra." Entre los proyectos que ha elevado, se destacan diversas declaraciones: desde adherir al último Acuerdo de Cambio Climático de París hasta nombrar huéspedes de honor a la cantante melódica italiana Laura Pausini y a su colega estadounidense Mariah Carey. Otra de sus iniciativas –por la cual le llovieron críticas– fue impulsar como personalidad destacada a Adriana Szusterman, la maestra jardinera que triunfó en la canción infantil interpretando el tema del Sapo Pepe. Según De las Casas, con sus declaraciones busca reconocer a personalidades solidarias que "hagan algo positivo. Los egos personales no me gustan."
Son lecturas. Por ahí alguien dice: Esta es una gorila que hace un libro sobre mucamas. Pero eso es sacarlo de contexto.
–¿Hace mucho que Lina trabaja para su familia?
–Desde siempre. La realidad es que ella es la persona que hace que nosotros podamos funcionar en sociedad. Es parte de la familia. Su hijo me preocupa tanto como los míos. El libro pretendía que ellas supieran el valor que tienen como profesionales.
Consultada sobre la ley que reglamentó el trabajo para el personal doméstico, sancionada en 2013, cree que ha mejorado la situación del sector. "Ni Perón sacó una ley para ellas. Me parece que hemos evolucionado. Ya no hay cuartos de servicio, que eran vergonzosos. Si Lina se tiene que quedar a dormir, tiene el mejor cuarto. Que duerma en mi cama, no me importa. Cuida a mis hijos, que son lo más importante", cierra la diputada antes de posar para la foto, custodiada por un óleo de Ítalo de Luca titulado simplemente "Amigas". «
Fuente: TiempoAr